Srebrenica, la vergüenza de Europa

Empieza el juicio contra el responsable de la matanza de Srebrenica

Data: 
14 Mar 2000

7.500 musulmanes "desaparecieron" ante la pasividad de los 'cascos azules'

VIVIANNE SCHNITZER - La Haya

El general serbio de Bosnia Miroslav Krstic no manifestó emoción alguna al escuchar los argumentos que sostienen el cargo de genocidio en su contra por la meticulosa planificacion y depurada ejecución de la masacre del enclave musulmán de Srebrenica, supuestamente bajo la protección de cascos azules, al abrirse ayer el juicio en el Tribunal Penal Internacional para juzgar los crímenes en la antigua Yugoslavia. El fiscal describió con detalle los crímenes perpetrados durante cinco días de julio de 1995 por los 15.000 soldados a cargo de Krstic.

La unidad Drina del Ejército serbio de Bosnia, conocida también como Los lobos del Drina, estaba bajo el mando de Krstic, antigua mano derecha del general Ratko Mladic y del líder político Radovan Karadzic, ambos prófugos de la justicia internacional.Citando cifras del Comité Internacional de la Cruz Roja, el fiscal Mark Harmon aseguró que 7.574 musulmanes desarmados desaparecieron y están "presumiblemente muertos". Hombres jóvenes y niños fueron deportados en 60 autobuses con destino desconocido y ejecutados con "las manos atadas a sus espaldas y los ojos vendados", dijo Harmon. Expertos forenses de la fiscalía han exhumado e identificado 1.866 cadáveres, pero, según el fiscal, hay otras 2.500 víctimas que aún yacen en fosas comunes, algunas de ellas "vaciadas" posteriormente por los soldados de Krstic, que trasladaron los cadáveres a zonas remotas para ocultar pruebas.

Que el juicio se realice justamente en La Haya tiene un alto grado de simbolismo. El proceso de selección de las víctimas, entre hombres y mujeres y por edad, se realizó a la vista y paciencia de 150 cascos azules holandeses ligeramente armados, que, obligados, colaboraron con los líderes militares serbios en la distribución de la aterrorizada población en los transportes. A pesar de que un reciente informe de la ONU los exculpa, Srebrenica es una llaga abierta en la conciencia nacional holandesa.

"El Ejército serbio de Bosnia organizó, planificó y participó activamente en el genocidio", dijo Harmon, que espera que este proceso sea el primero en la historia del tribunal en que se dicte una sentencia de culpabilidad por genocidio, el más grave de los crímenes de guerra, que incluye la intención de acabar parcial o totalmente con un grupo étnico o religioso y que Krstic negó tras su captura en diciembre de 1998.

Los supervivientes de Srebrenica, unas 30.000 personas, en su mayoría ancianos y mujeres, fueron deportados, pero cinco años después no están dispuestos a olvidar. Un grupo de "madres de Srebrenica" sigue atentamente el juicio y considera que la cadena perpetua para Krstic no es suficiente. Las viudas y madres de Srebrenica quieren que Karadzic y Mladic se conviertan en compañeros de prisión del general Krstic.