Srebrenica, la vergüenza de Europa

AGENCIAS - Sarajevo

Pese a que ni uno solo vive en Srebrenica ya, los musulmanes han ganado las recientes elecciones municipales en el antiguo enclave de Bosnia oriental, del que fueron expulsados a sangre y fuego por los serbios en julio de 1995 en uno de los exterminios más atroces de la Europa de posguerra. Resultados provisionales de los comicios celebrados el mes pasado arrojan 24 escaños sobre 45 para el partido nacionalista musulmán Acción Democrática (SDA), del presidente Alia Izetbegovic. Dos partidos serbios han obtenido los restantes.La previsible victoria, que debería permitir teóricamente al SDA reconquistar la ciudad perdida, no tendrá por el momento ningún efecto práctico. Srebrenica es ahora étnicamente pura y sus nuevos dueños, como sucede en otros lugares de Bosnia, han asegurado que no hay lugar en ella para sus enemigos. [El copresidente serbio de Bosnia, Momcilo Krajisnik, aseguraba el mes pasado a EL PAíS que si los musulmanes ganaban asumirían el poder en los ayuntamientos ahora en poder de los serbobosnios]. El voto de refugiados y desplazados, autorizados en los comicios del 13 y 14 de septiembre a elegir alcalde en el pueblo donde vivían antes de la guerra, ha permitido lograr la mayoría a los musulmanes de Srebrenica, el 73%, instalados hoy en Tuzla o Sarajevo.

En julio de 1995, las tropas serbobosnias a las órdenes del general Ratko Mladic, buscado como criminal de guerra por el Tribunal de La Haya, entraron en Srebrenica y, ante la pasividad de la guarnición de cascos azules holandeses desplegados para proteger el enclave, asesinaron a varios miles de hombres en un par de días y los arrojaron a fosas comunes.