Los maestros de la República en Manresa.
Trayectorias, pedagogías y depuraciones
Educación
27/4/1931 “Els obrers i l’escola”, Hermenegild Lladó: la proclamación de la República estimuló las demandas de una mejor formación educativa de toda la sociedad porque no podemos olvidar que, en 1931, casi la tercera parte de la población catalana todavía era analfabeta cuando, en otros países industriales europeos, la alfabetización ya era casi universal. En este artículo el maestro manresano Hermenegild Lladó aboga por el acceso a la educación de los hijos de los obreros y, por lo tanto, esto hace necesaria la mejora de las condiciones materiales y de trabajo de la enseñanza pública.
28/5/1931 “El problema de l’educació”, Hermenegild Lladó: el maestro manresano Hermenegild Lladó insiste en el problema educativo que afecta a Cataluña y a España al inicio de la República y lo expone como un problema primordial a resolver. De hecho, un primer objetivo que se marcó el nuevo gobierno de la República fue la creación de 27.000 escuelas en un período de 3 años para acabar con el problema de la falta de plazas escolares.
21/12/1932 “Per què l’Escola Única?”, R. Folch i Capdevila: la escuela única o unificada se refiere al concepto, nacido con la creación de los Estados-nación en el siglo XIX, de que la enseñanza debe ser única y gratuita para todo el mundo. Sobre este concepto se fundamentó en la segunda mitad del siglo XIX el sistema público de enseñanza en Francia, el mejor de los creados en Europa. El concepto de escuela única va unido a la idea de que cualquier ciudadano tiene derecho a recibir una educación de calidad y llegar, independientemente de su origen social, a la máxima calificación que le permitan su inteligencia y sus ganas de progresar.
Conseguir la escuela única, lo que significaba la eliminación de la enseñanza religiosa, fue uno de los objetivos republicanos. Rafael Folch i Capdevila (1881-1961), poeta y escritor que pertenecía a la Unió Socialista de Catalunya, justifica en este artículo las ventajas de la escuela única como fundamento de la democracia.
3/3/1933 “És necessari la creació de l’Escola Social”, Jaume Quadrat i Rialp: La falta de formación del profesorado y la burocratización de la enseñanza eran dos problemas que se intentaron solucionar durante el período republicano por un conjunto de maestros entusiastas de su trabajo y que veían que había que formarse y cambiar el talante de la escuela pública. En este artículo, Jaume Quadrat (1899-1993), maestro de Aguilar de Segarra y militante de ERC, que fue director de una de las colonias escolares organizadas por el ayuntamiento de Manresa, defiende la transformación de la escuela pública en lo que él llama Escuela Social, que no sería nada más que una escuela viva que respondiera a las inquietudes de la calle, laica, que enseñara al niño a pensar, que le formara para la vida moderna alejada de la rutina escolar del tiempo de la monarquía y donde los maestros fueran algo más que burócratas. Jaume Quadrat fue, posteriormente, director de la revista El Magisteri Català y, tras la guerra civil, tuvo que exiliarse a Francia y a Brasil.
4/10/1933 “Apuntalem la República creant l’Escola Social I”, Jaume Quadrat; 7/10/1933 “Apuntalem la República creant l’Escola Social II”, Jaume Quadrat; 11/10/1933 “Apuntalem la República creant l’Escola Social III”, Jaume Quadrat: los republicanos creían que una parte importante de la fuerza de la monarquía, de la Iglesia y de la derecha, residía en la falta de cultura y la ignorancia del pueblo y, por este motivo, desde el primer momento emprendieron una obra de gobierno de construcción de escuelas, ampliación de las plazas de maestro, formación de adultos, etc. porque creían que, ampliando los conocimientos culturales del pueblo, fortalecerían la democracia y la República. Esta es la idea que subyace en la serie de tres artículos escritos por el maestro Jaume Quadrat i Rialp (1899-1993), quien defiende una escuela estrechamente relacionada con la sociedad donde se anime a la participación social del alumnado.
25/4/1935 “La Festa de l’Arbre” : uno de los objetivos educativos de las escuelas racionalistas era fomentar el respeto a la naturaleza. El Ateneo Obrero Manresà, la única escuela racionalista que había en Manresa en aquellos momentos, organiza la Fiesta del Árbol en el bosque de Joncadella el domingo 28 de abril. Se plantan árboles y los alumnos presentan una velada con diferentes actuaciones, recitaciones, etc.
20/4/1936 “La Festa de l’Arbre”: el Ateneo Obrero Manresà hace una excursión al Bosque de Besora, de Joncadella, para hacer una plantada de árboles. Asisten el alcalde y concejales del ayuntamiento. Por la noche los alumnos hacen una velada literario-musical donde asisten el alcalde, concejales, representantes de la autoridad militar y del Consejo Local de Primera Enseñanza y de los maestros nacionales.
2/10/1937 “Què passa a l’institut?”: por orden del Ministerio de Instrucción Pública, en el año 1937, se creó una Comisión Depuradora de alumnos en el Instituto de Manresa –como en todos los institutos– integrada por el Centre Federal, Acció Catalana Republicana, ERC, UGT, el PSUC y la CNT. Este hecho provocó alguna polémica entre los mismos partidos políticos que integraban la Comisión Depuradora.